El cannabis, comúnmente conocido como "cáñamo", es una hierba anual, dioica, originaria de Asia central y actualmente extendida por todo el mundo, tanto silvestre como cultivada. Existen numerosas variedades de cannabis, y es una de las primeras plantas cultivadas por el ser humano. Los tallos y las varillas del cáñamo se pueden transformar en fibra, y las semillas se pueden extraer para obtener aceite. El cannabis, como droga, se refiere principalmente a la planta india de cannabis, enana y ramificada. El principal ingrediente activo de las drogas de cannabis es el tetrahidrocannabinol (THC).
Las drogas de cannabis se dividen en tres partes:
(1) Productos de plantas de cannabis secas: Se elaboran a partir de plantas de cannabis o partes de plantas después del secado y prensado, comúnmente conocidos como cigarrillos de cannabis, en los que el contenido de THC es de aproximadamente 0,5-5%.
(2) Resina de cannabis: Se obtiene de la resina que exudan el fruto y la parte superior de la flor de cannabis tras prensarla y frotarla. También se le llama resina de cannabis, y su contenido de THC oscila entre el 2 % y el 10 %.
(3) Aceite de cáñamo: una sustancia de cáñamo líquida purificada a partir de plantas de cáñamo o semillas de cáñamo y resina de cáñamo, y su contenido de THC es de aproximadamente 10-60%.
planta de cannabis
El consumo excesivo o prolongado de marihuana puede provocar graves daños a la salud de una persona:
(1) Trastornos neurológicos. La sobredosis puede causar pérdida de conocimiento, ansiedad, depresión, etc., impulsos hostiles hacia otras personas o intenciones suicidas. El consumo prolongado de marihuana puede inducir confusión, paranoia y delirios.
(2) Daño a la memoria y la conducta. El abuso de marihuana puede disminuir la memoria, la atención, el cálculo y el juicio, lo que provoca lentitud de pensamiento, confusión mental y confusión mental. Fumar a largo plazo también puede causar encefalopatía degenerativa.
cannabis terminado
(3) Afecta el sistema inmunitario. Fumar marihuana puede dañar el sistema inmunitario, lo que resulta en una disminución de la función inmunitaria celular y humoral, haciéndolo más susceptible a infecciones virales y bacterianas. Por lo tanto, quienes fuman marihuana presentan más tumores orales.
(4) Fumar marihuana puede causar bronquitis, faringitis, ataques de asma, edema laríngeo y otras enfermedades. Fumar un cigarrillo de marihuana tiene un impacto 10 veces mayor en la función pulmonar que fumar un cigarrillo convencional.
(5) Afecta la coordinación del movimiento. El consumo excesivo de marihuana puede afectar la coordinación de los movimientos musculares, lo que resulta en problemas de equilibrio, temblor en las manos, pérdida de maniobras complejas y la capacidad de conducir un vehículo motorizado.
Hora de publicación: 24 de febrero de 2022